Celebración del 13 de mayo en la Catedral de Santo Domingo
No podemos menos de interesarnos por la formación de las nuevas generaciones, por su capacidad de orientarse en la vida y de discernir el bien del mal, y por su salud, no solo física, sino también moral
Los niños y jóvenes son como pequeñas plantas, que necesitan de cuidados especiales para poder desarrollarse. Los principios inculcados en esa edad permanecen la vida entera.
Por ver en la Cultura y en el Arte eficaces instrumentos de evangelización, los Heraldos habitualmente echan mano de la música tanto por instrumentos como por voces.
Así es que grande número de coros, orquestas y conjuntos musicales fueron constituidos por los Heraldos del Evangelio, a fin de llevar su mensaje de Fe y de Esperanza a la Sociedad contemporánea.
Este papel tan importante del arte ha sido resaltado por el Papa Benedicto XVI -él mismo un gran apreciador de la música- en varias ocasiones, como por ejemplo en las palabras finales de agradecimiento por el concierto ofrecido por el Presidente de la República Italiana por ocasión de su tercer aniversario de Pontificado el 24 de abril de 2008:
Existe una misteriosa y profunda relación entre música y esperanza, entre canto y Vida Eterna. Por este motivo la tradición cristiana representa a los espíritus bienaventurados, en cuanto canta en coro, raptados y extasiados por la belleza de Dios
Ocupar a los jóvenes con las elevadas actividades del arte y de la cultura, del pensamiento y de las sanas ideas, pues donde hay desocupación está el peligro.
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Mente sana en cuerpo sano ayuda a vencer los desafíos de nuestros días. Así el deporte, las artes escénicas y la música, bien encausadas, constituyen una excelente opción. Por esa razón, en los Heraldos del Evangelio hay misioneros dedicados especialmente a la formación de las nuevas generaciones.
El trabajo de los Heraldos del Evangelio no pretende sustituir, sino auxiliar, los esfuerzos dispensados por los padres y maestros de los jóvenes en pro de su formación. Y tanto unos cuanto otros aprecian esa colaboración.
Motivar el joven a desarrollar el gusto por la cultura y la naturaleza, por medio de una enseñanza viva y rica en ética, historia y ciudadanía, es el objetivo de las actividades realizadas en las casas de formación de los Heraldos del Evangelio.
Es necesario mostrar que tener la mente sana y el cuerpo sano es la solución para vencer los desafíos de nuestros días, y que el deporte, las artes escénicas y la música, constituyen una excelente opción.